Las edificaciones semienterradas están protegidas de los cambios extremos en la temperatura exterior, de la precipitación, el viento y la humedad.

Además de proteger a la edificación de los elementos, el semi-enterramiento ayuda a preservar el hábitat natural y reducir la transmisión del ruido exterior.

Oriente la edificación a fin de maximizar la ventilación natural, iluminación natural y, en climas fríos, la ganancia de calor solar pasivo.

Consideraciones:

  • Los muros y estructuras de contención  de la tierra deberán usar membranas impermeabilizantes continuas similares a las utilizadas en techos vegetados y piscinas.
  • Provea una circulación de aire interior adecuada para evitar el moho y la condensación, sobre todo en climas húmedos.
  • Si se utiliza aislamiento térmico, colóquelo en la superficie exterior del muro de contención.
  • Procure construir las estructuras semienterradas por encima del nivel freático, dirigiendo el drenaje lejos de la edificación. Las edificaciones semienterradas no se recomiendan en zonas y terrenos propensos a la inundación.